Fotos de víctimas, a partir del 27 de febrero en adelante (2004)

Agradecemos a Alexandra Paredes que nos hizo llegar estas fotos

(Al "clikear" las fotos, estas crecen)

El testimonio de otra infamia:

Amigos,

No he dejado de ir a casi ninguna marcha, concentración o manifestación a no ser por motivos de fuerza mayor. He respirado, chupado, absorbido, inhalado y masticado todo tipo de gases lacrimógenos. Me he lamentado y llorado mil veces ante tantas escenas de violencia, injusticia e impunidad que los venezolanos hemos tenido que presenciar, compartir y padecer. No he dejado de sentir rabia, ira e impotencia. No he dejado de tener ganas de gritar, de insultar, de decir todas las malas palabras que conozco cada vez que uno de estos engendros abre su sucia boca para mentir, humillar, manipular y destruir este país.

 Pero NUNCA había sentido un dolor y un malestar tan profundo e intenso como el día 1° de marzo de 2004 a las 10:30 p.m. A esa hora, 2 convoy de la Guardia Nacional, con cerca de 15 hombres cada uno, pasaron por delante de la casa de amigos en Altamira donde mi hijo y su esposa se disponían a montarse en su carro e irse a su casa (a 2 cuadras de la mía). Sin explicación ni razón alguna, a él lo golpearon y patearon obligándolo a montarse en ese vehículo del terror. Allí disfrutaron clavándole la culata y el cañón de sus rifles por todo el cuerpo, y golpeándole con las botas, cascos, peinillas, rolos, y puños indiscriminadamente. Nunca pudo verles la cara dado que jamás se quitaron las máscaras anti gas, lo cual dio pie para que detonaran bombas lacrimógenas dentro del convoy. Mi hijo usa lentes, y gozaron quitándoselos y reventándolos a pisotones. No dejaron de reír mientras lo maltrataban.

En la Cota Mil a nivel de El Marqués dirección Este, estos mal nacidos lo tiraron a la calle obligándolo a golpes a acostarse boca abajo en el pavimento para darle otra vez una buena golpiza de despedida.

¿Qué puedo pedir o sentir por estos degenerados GN en estos momentos? ¿Lástima? No siento ninguna, no poseo ese tipo de sentimientos tan benévolos . ¿Rabia? Esa palabra es demasiado chucuta, chucutísima. ¿Odio? ¿Arrechera? No, amigos. No lo puedo explicar, es una mezcla de asco, repugnancia, náuseas y un muy profundo desprecio. … que Dios haga con ellos lo que bien merecen.

 Adjunto fotos tomadas de los traumatismos sufridos por mi hijo… que me duelen más que si fueran en carne propia. Me duele lo que sufrió su esposa al ver cómo estos engendros apaleaban a su esposo y a golpes se lo llevaban sin saber ella a dónde. Me duele mi familia, mi gente, mi país y las ilusiones de nuestros  jóvenes, que de seguir con este régimen, nunca se podrán cristalizar.  

 Tengo que agradecer a un funcionario local, quien tuvo la amabilidad de llamarnos por el celular y decirnos que ya lo traían en camino a Altamira después de recogerlo, ya que él había cruzado la Cota Mil para correr por ésta en dirección oeste (hacia Altamira). La familia que consoló a mi nuera siempre tendrá un lugar especial. Igualmente agradezco a los médicos y al personal de Salud Chacao, que lo asistieron en todo lo que pudieron, pero hubo que continuar con ecosonograma y otros exámenes en una clínica ya que no disponían de los equipos requeridos. La atención de la Clínica Avila también fue impecable.

 Son las 3:55 a.m. y aún no han terminado de examinar a mi hijo. Sufrió contusión pulmonar y golpes en el hígado y los riñones, politraumatismos, trauma encefálico, trauma toráxico, trauma abdominal y trauma lumbar.

No quiero pensar en el dolor y el color de su cuerpo mañana

       

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